Querido Sobezno:
No puedo evitar sentir una gran emoción cada vez que veo imágenes de tu marcha, ya sea en video o en fotografía, evidentemente mi perspectiva de la marcha puede ser diferente y mas cercana a la de los demás, incluso de privilegio diría yo, por razones obvias y de todos conocidas, y por eso este sentimiento.
Los recuerdos me vienen a la memoria a borbotones y como ya he dicho en muchas ocasiones, unos recuerdos formidables, agradables, amenos, por tu trato, y por qué no, también de aventura y me hubiera gustado que esos momentos que compartimos tu y yo, y algunos mas, durante tu marcha, hubieran sido compartidos por muchos para que todos tuvieran ahora los mismos recuerdos y el mismo sentimiento que tengo yo.
Lo tuyo fue, sin la menor duda, la mayor hazaña llevada a cabo por una persona en pos de una profesión digna y así pasará a la historia, es verdad que hubo muchos compañeros que te apoyamos y que probablemente sin ellos, sin sus ideas y apoyo moral, la marcha no se habría llevado a cabo, pero eso no resta, para nada, el menor mérito al que realizó el esfuerzo y que como dice la presentadora del programa en lo que considero una frase, lapidaria: “Llevará la mochila con la ilusión de muchos compañeros, pero el único que camina es él”.
No obstante y en lo que a mi respecta, he tratado de olvidar las polémicas que se organizaron después de la marcha, casi todas creadas por un probable y equivocado afán de protagonismo, que por otro lado tampoco era tan extraño que todos se sintieran de una forma o de otra, partícipes de la marcha casi por igual, debido al contacto telefónico que había, casi constante, junto con las crónicas, que te hacían ser participativo de la marcha en ilusión, sin realmente serlo en la realidad.
Por todo ello, pienso que a pesar de los ataques que después de la marcha sufrimos, tanto tu como yo, guardo un buen recuerdo de todos, por que en honor a la verdad, durante la marcha, que es lo que yo mejor he guardado en mi memoria, salvo pequeños matices, todos se volcaron en alabanzas, ánimos y apoyo moral, hacia tu persona.
Así que por mi parte, me quedo con lo bueno que viví durante tu marcha, que fue mucho, así como con el recuerdo de muchos compañeros que jugaron un papel importante de muchas maneras en aquellos días y espero que algún día, todos nos podamos perdonar nuestros defectos y nuestras meteduras de pata y al igual que hicimos en Málaga cuando terminó la manifestación que dio inicio a la marcha, que por cierto fue una gran manifestación y que debo de felicitar por ello a su organizador así como la buena atención que tuvo con todos los que asistimos, nos sentemos todos alrededor de una mesa, nos reconciliemos y nos demos un sincero y fuerte abrazo, al menos eso es lo que a mi me gustaría.
Así que, querido Sobezno, te animo a la reconciliación o a cuando menos, olvidar lo malo y quedarnos con lo bueno, que como digo fue mucho.
También me gustaría dejar claro que, como el tema al que me estoy refiriendo fue muy “complicado” y se produjeron algunas heridas importantes en los sentimientos de algunos, no quisiera de ninguna manera en estos momentos y con las palabras que he escrito, removerlas ni profundizarlas, si no todo lo contrario, por lo tanto si no he sido correcto o pueden dar otra impresión, pido de antemano perdón.
Un fuerte abrazo para todos los que de alguna manera participaron e hicieron posible que la marcha de Sobezno se llevara a cabo.
Y un fuerte abrazo para ti, Sobezno, el cual con su caminata y con su forma de ser nos hizo vivir durante un tiempo con ilusión y esperanza.
M. Álvarez.
Para saber del tema: http://www.youtube.com/watch?v=Ys5dvQilkNA
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