domingo, 29 de julio de 2007

Blindado, Vehículo especial

A mi me parece que decir que, un vehículo blindado no es un vehículo especial son ganas de buscarle los tres pies al gato y no creo que para demostrar esto, haga falta, traer aquí reglamentación alguna, pues solo hace falta un poquito de sentido común para ver tal cual lo que tenemos delante de los ojos.

Que la normativa existente no lo define así, que lo ignoro, no importa, pero eso no quiere decir que no lo sea ya que como todos sabemos, una cosa es la realidad y otra lo que nos quieren hacer ver como realidad, cuando lo que les importa a los legisladores son solo cubrirse las espaldas y dar apariencia legal a las cosas para satisfacer los intereses de los demandantes, bien sea Gobierno o Empresas Privadas, que son las que pagan.

¿Por qué entonces se considera un vehículo especial a un Toga del ejercito y no a un blindado de una empresa privada, cuando son dos vehículos de similares características, fabricados de forma exclusiva y con unas funciones parecidas, transportar a personas de forma medianamente segura?

Si para cualquier debate, echamos manos de toda la legislación existente en Google, nos volveremos locos y a la vez perderemos nuestra capacidad de pensar, de raciocinio y de criterio propio, fundamental, precisamente en nuestra profesión, (¿no si sabréis a qué me refiero?) y no estoy hablando de negar las Leyes ni sus reglamentos, pero todos sabemos que no está todo legislado, ni que todo es perfecto y que casi siempre las normas van seguidas a las desgracias y no al revés como debería de ser, por lo tanto, mi opinión al respeto es que, mientras no se me demuestre lo contrario, y utilizando el sentido común que, un vehículo blindado, por razones que saltan a la vista, es un vehículo especial y que por su cometido, también especial, está exento de de cumplir con algunas de las normas de obligado cumplimiento para el resto de vehículos que circulan por la vía pública, como por ejemplo, el de abrirlo en cualquier sitio aunque lo diga la Guardia Civil de Trafico o el de llevar Tacógrafo, o respetar las paradas que obligan a los camiones de su peso.

Todos esos aspectos como su construcción especifica respetando toda una normativa al respecto, por talleres especializados y homologados, conducidos por Vigilantes de seguridad armados, con su correspondiente permiso de circulación, debido mas que al tamaño a su gran tonelaje, hacen que mi sentido común me diga, sin tener que echar mano a ninguna normativa, que es un vehículo especial, y personalmente añadiría que, muy especial. Y a partir de ahí, que cada cual piense lo que quiera.

Y que el permiso de circulación requerido es el mismo que para cualquier vehículo que circule por la vía pública y que exceda de 3.55 kilos, sin mas.

Saludos.

M. Álvarez.

lunes, 9 de julio de 2007

Sobre la Sentencia y la Negociación

Sobre la Sentencia y la negociación.

Esta sentencia ha caído sobra las Empresa de Seguridad como un jarro de agua fría en pleno Enero.

Nadie se esperaba algo así, ni siquiera los sindicatos que la promovieron y ha sido a posteriori cuando las consecuencias de una sentencia de este calado están saliendo a flote pero, no de golpe, si no poquito a poco, porque nadie es capaz aun de prever las verdaderas y definitivas consecuencias que a la larga realmente tendrá.

Se sabe de las artimañas que se valían, tanto las empresas como los sindicatos para que, la hora ordinaria no superase el valor de la extraordinaria, como por ejemplo dejar fuera y sin computar las pagas extras, o dejar sin cotizar los pluses de Vestuario y Transporte.

Siempre ha sido una estrategia empresarial de primer orden que los trabajadores realizasen muchas horas extras, y para que esto fuera posible, la formula era muy sencilla: Bajos sueldos y bajo precios de las horas extras. Esas eran las dos claves de la negociación Colectiva.

Sencillamente, con un sueldo bajo los trabajadores se ven obligados a realizar horas extras y para que las horas extras se puedan realizar en grandes cantidades solo hay que contener su precio para que nunca superen al sueldo aunque si lo multipliquen por dos.

Es sabido por casi todos también, (ahí está el artículo del Interviú, donde un solo banco dona a los sindicatos, 800 millones de las antiguas pesetas por permitir la contención en la subida salarial. Hablando claro, que por no subir los sueldos por encima de un tanto por ciento, lo que le iban a dar a los trabajadores, se lo dan a los sindicatos y de esta manera no hay tal subida por encima del IPC y dándoselo a los sindicatos se considera algo así como donación a una ONG y que encima les desgrava, de forma que la corrupción está servida en bandeja de plata.

Conclusión: Los sindicatos no negocian pensando en los trabajadores si no en ellos, en cuanto van a coger, pues estos se han transformado ya, en empresas mediadoras mas que sindicatos tradicionales, y ya sabemos qué es un mediador, lo estamos viendo todos los días en los telediarios, todos los tienen, los gobiernos, las empresas, los terroristas, las petroleras, los traficantes de armas, la iglesia, los contrabandistas de droga, los abogados y como no podía ser menos, ya los sindicatos también.

Ahora bien, yo entiendo que hay dos clases de negociadores, los honestos y los deshonesto.

.- Los honestos miran por su cliente, por supuesto sin olvidar sus beneficios, que previamente han sido acordados de cómo y de donde van a salir, pero que por dignidad profesional anteponen en todo momento los intereses de su cliente.

.- Los deshonestos, son los que te hacen ver con engaño que te están defendiendo cuando la realidad es la contraria, te están engañando como a un niño chico y embolsándose grandes sumas de dinero a costa de su cliente, que es mas fácil y no requiere ni estudios ni preparación ni conocimiento alguno, solo ser un trápala sin escrúpulos.

¿Alguien tiene alguna duda de qué clase de negociador nos ha venido negociando el convenio hasta ahora de las dos clases mencionadas?

Así que por favor, no nos sigamos engañando pensando que los niños viene de París, en estos tiempos quedan muy pocas personas que hagan algo por nada, y las que quedan son difíciles de encontrar. ¿alguien lo pone en duda?.

Por estas razones, la Sentencia los ha cogido a las empresa y a los sindicatos con el pie cambiado, pues todos de forma encubierta se beneficiaban de esos sueldos y horas tan bajos de precio, y ahora les obliga por Ley a todo lo contrario, y como digo, todo lo que sea darle a los trabajadores es quitarle a las empresa y a los sindicatos y por eso en estos momentos están como gato acorralado, de espaldas a la pared y con las uñas fuera.

La Sentencia viene a decir sencillamente que se cumpla la Ley que ya existía y que las empresas y sindicatos se estaban saltando a la torera como es el Estatuto de los Trabajadores en su Articulo (..). luego no viene a decir nada nuevo, aunque eso si, que las empresas estaban estafando a los trabajadores, pero no pone ni quita, solo dice que se cumpla la Ley que ya existía, anulando la estafa que se estaba cometiendo.

¿Cual es entonces el verdadero problema que se le presenta a las empresas después de esta sentencia?.

Muy sencillo, ajustar los sueldos al nivel de vida de la sociedad actual, y como complemento, para que como en cualquier otro trabajo cuando por extrema necesidad se tenga que realizar horas extras, ponerle un precio por encima de la hora ordinaria y cuando se acumulen 8 horas extras realizadas, dar un día de descanso compensatorio si el trabajador así lo requiere.

¿Tan difícil es entenderlo?.

Yo creo que no, pues la mayoría de los convenios y la administraciones públicas, así lo tienen, además de jornadas de 35 horas a la semana en algunas comunidades, y les va de muerte.

Pero claro, ¿Alguien se cree que las empresas van a aceptar algo así?

Por supuesto que no, aunque es por eso, por lo que los trabajadores deberíamos de luchar con todas las armas a nuestro alcance.

Modestamente me atrevería a realizar una propuesta para la próxima negociación colectiva, sea cuando fuere y es la siguiente:

1.- Los trabajadores a través de los sindicatos y asociaciones (que esa sería otra, ponerlos de acuerdo) prepararían una plataforma reivindicativa con unas subidas salariales dignas acorde con los tiempos y el nivel de vida actual sacando la media nacional y basándonos para ello en las estadísticas del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

2.- En el salario base estarían incluidos todos los pluses, exceptuando solo aquellos que fueran exclusivos de un servicio en concreto y que requiriera una preparación y dedicación especial.

3.- Las horas extras, con el 75% por encima de la ordinaria como en su día marcaba la Ley y consideradas Estructurales de forma que su cotización sirva también a la hora de la jubilación y no como ahora que solo sirven para pagar impuestos y nada mas.

4.- Una vez conformada y acordada dicha plataforma reivindicativa, se le entregaría a los “negociadores” con una máxima innegociable: de ahí para arriba lo que quieras, junto con tu comisión, para abajo ni un céntimo, y si no se ven capacitados para llevar una negociación así, que lo digan de entrada y se buscan otros, pues para eso también tenemos los trabajadores la basa del Conflicto Colectivo donde saldríamos sin duda beneficiados.

Imagino que los “Comedoras” nunca les va a parecer esta propuesta aceptable y son una mayoría aplastante por lo que una negociación así va resultar, ardua difícil y larga, pero como le dijo el perro al hueso, “tu eres duro de roer, pero mas duros tengo yo los dientes”.

Definición de “Comedoras”:

Persona que por regla general también es un pelotas, dispuesto a todo lo que le mande la empresa aunque no sea reglamentario, que solo le importa realizar horas extras sin importarle la calidad del servicio, muy poco profesionales y que nunca están dispuestos a secundar ninguna medida de presión que se proponga en beneficio del colectivo en general, son capaces de reventar cualquier huelga realizando las horas del que vaya a la huelga para que no se note la falta y mantendrán al jefe informado de todo lo que se enteren con el fin de conseguir la palmadita en la espalda y se les conoce a simple vista por sus jadeos constantes y su habilidad para contarle chistes a los jefes además de reírle siempre las “gracias” por poca que tenga.

09/07/07

Saludos.

M. Álvarez.

domingo, 8 de julio de 2007

La Ley no es para los Vigilantes

LA LEY DE PREVENCIÓN DE RIESGOS LABORALES (LPLR).

A este respecto se está hablando últimamente mucho y lo que es peor, se está intentando hacer ver que se debe de aplicar también al personal de la Seguridad Privada o lo que es lo mismo, a los vigilantes de Seguridad.

Creo que es un error de bulto pues aunque lo pueda parecer y así lo puedan decir los responsables, en ningún momento dicha Ley está pensada para que pueda ser adoptada por los vigilantes de Seguridad y en este caso no es que sea por menosprecio si no todo lo contrario pues se presupone que el vigilante de seguridad está por encima de esta Ley y me explico:

Creo y mas bien dría, que los Vigilantes de Seguridad en el ejercicio de sus funciones, entrarían, de alguna manera, la obligación de que allá donde presten servicio, hagan cumplir dicha Ley, por lo tanto estarían obligados también a ser conocedores a la fuerza de la Ley.

Siempre he dicho que, donde haya un Vigilante de Seguridad es la máxima autoridad en materia de seguridad, así como de su prevención y si en su lugar de servicio observara que un trabajador no cumple con las medidas de prevención a las que está obligado por Ley su obligación sería advertirle primero y a continuación si persistiera su actitud, informar, verbalmente o por escrito a sus superiores, pero si considerase que existe un peligro inminente, estaría obligado a tomar las medidas oportunas para que evitar cualquier posible siniestro.

Por lo tanto creo que, la Ley en cuestión no está hecha para que nosotros la cumplamos si no para que la hagamos cumplir y si alguien puede decirme concretamente cuales son las medidas de protección que la Ley recoge destinadas a los vigilantes de seguridad, le quedaría muy agradecido.

Saludos.

M. Álvarez.

viernes, 6 de julio de 2007

Estado de la Seguridad

Colaboración:

Juan Carlos García Serrano
Director de Seguridad por la Universidad Carlos III
Fuente: Securitecnia

La seguridad privada ha experimentado un crecimiento espectacular en los últimos años, producto de las nuevas demandas sociales, motivado por un aumento de la inseguridad ciudadana, sustitución de personal propio de las empresas por vigilantes de seguridad, sustitución inclusive de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en algunos centros o edificios oficiales y, por otro lado, también porque la propia Ley de Seguridad Privada establece con exclusividad el desempeño de este tipo de servicios a los vigilantes de seguridad.

Esto motiva que la oferta de trabajo sea mayor que la demanda de empleo, con los consiguientes inconvenientes que representan para el sector, que no encuentra personal suficiente y adecuado para cubrir los servicios.

Otro de los inconvenientes es que la calidad del servicio también se resiente porque prácticamente no hay suficientes candidatos para realizar una selección adecuada o acorde a las circunstancias.

Algunas asociaciones de profesionales solicitan al Gobierno luz verde para permitir que algunos colectivos, hasta ahora limitados, puedan acceder a este tipo de puesto de trabajo, alegando la escasez de mano de obra, justificándolo en algunas ocasiones en que, si no hay impedimentos para acceder a las Fuerzas Armadas, porqué no lo pueden hacer en la seguridad privada.

Si es o no bueno habría que analizarlo más detenidamente para no cometer errores graves que luego haya que lamentar, y quizás para entonces sea demasiado tarde. A priori tengo mis dudas sobre si es o no seguro. Quizás sí, pero desconozco si se ha hecho algún estudio serio sobre el impacto que puede tener.

Bajo mi punto de vista, dejar que ciertos colectivos puedan acceder a estos puestos de trabajo crea cuando menos incertidumbre. Se tiene que tener en cuenta que la seguridad de algunos importantes centros, como es un banco, un centro de procesos de datos, centros de transformación de energía, museos, estaciones de tren, aeropuertos o simplemente un Ministerio u Organismo oficial, etc., podría pasar a depender exclusivamente de estas personas, y todos los sistemas de seguridad quedarían al descubierto y su entero control.

Nadie duda de las buenas intenciones de ellas, pero ahora a los españoles se les está exigiendo un Certificado de Antecedentes Penales porque se ha creído conveniente como medida de seguridad. La duda es si los certificados de antecedentes penales que estas personas presentan tienen la misma garantía y fiabilidad que los expedidos por las autoridades españolas, ya que en España este dato no se puede comprobar.

Creo que es una duda razonable, y en seguridad a priori, antes de dar un paso hay que descartar cualquier hipótesis en contra.
En cuestión de seguridad no basta con poner los medios, sino que hay que asegurarse de que esos medios también van a funcionar, por lo que cuando haya dudas, hay que resolverlas antes de tomar una decisión y, si existe el más mínimo riesgo, lo que hay que buscar son soluciones alternativas, cuando se pueda, para evitar los efectos negativos que se puedan derivar.
Con el rápido crecimiento del sector se han creado multitud de empresas de seguridad que la única finalidad que persiguen es contratar servicios a costa de lo que sea. No les importa para nada la calidad del servicio, como lo están demostrando algunas de ellas, que prefieren coger un servicio en precarias condiciones, sin analizar los riesgos antes de decir que no, teniendo al personal en pésimas condiciones de trabajo. Esto no es bueno para ellas ni para el propio sector que acaba desacreditándose con el tiempo y, por supuesto, tampoco lo es para el cliente cuya seguridad queda en entredicho y no es la más adecuada.

Hay que trabajar para conseguir y mejorar constantemente la calidad, sin dar un paso atrás, y esto no se consigue a costa de conseguir servicios a cualquier precio o de cualquier forma, sino haciéndoles en las condiciones idóneas.
Si el problema fuese por falta de personal no estaría la Dirección General de la Policía examinando continuamente a un número elevado de personas y el Ministerio del Interior no hubiese expedido tantas habilitaciones, las cuales son bastantes más numerosas que las plazas que se necesitan. Entonces, ¿por qué hay más oferta de trabajo que demanda? ¿Qué es lo que pasa? ¿Dónde está el problema?
La gente que observa esta profesión desde fuera, sin estar integrado en ella, no conoce muy bien el trabajo que se hace ni las condiciones laborales de los vigilantes de seguridad. Muchos eligen esta profesión con la intención de quedarse, como demuestran las habilitaciones expedidas, pero por circunstancias, cuando llevan un tiempo, se acaban marchando.

Cuando llevan varios meses o años en el sector empiezan a ver los verdaderos problemas: salario escaso, incomodidades propias del servicio, enfrentamientos con la gente, turnos rotatorios, noches, festivos, riesgos, incertidumbres en los horarios ya que cambian continuamente sin atenerse a ninguna regla, etc... Un sin fin de problemas que hacen que sea un trabajo incomodo y mal retribuido, que produce muchos inconvenientes y que, en ningún caso, se ve compensado con el salario. Sin olvidar el desarraigo familiar que conlleva los horarios y el exceso de horas.

Y esto creo que es la consecuencia y el origen del problema que tiene la seguridad privada y, por consiguiente, se produce una excesiva rotación de personal. Y al final surge el problema: no hay personal suficiente para cubrir los servicios. Hay mucha gente que está utilizando esta profesión como puente hasta que consigue otro trabajo mejor o más estable. Por lo que quiero decir que el problema no está en la falta de personal, sino en el porqué no se quedan una vez que han elegido esta profesión y han superado las pruebas.


Y es en estas cuestiones donde debería hacerse más hincapié porque ésta es la verdadera causa que considero de la falta de personal, por lo que, lo que hay que hacer es buscar soluciones a este problema y no a otros.
Hay que partir de la premisa de que si se quiere un buen servicio de seguridad hay que pagarlo, y el coste lo tiene que asumir todo el mundo, pero no a costa sólo del vigilante. Desde el propio cliente que tiene que pagar un precio más elevado, si lo que quiere es calidad, y la propia empresa, que debe ajustar más sus márgenes.
Y cuando se contrate un servicio hay que informar al cliente de los inconvenientes y falta de idoneidad para que se resuelva y pongan los medios antes de empezar, y no tenga el vigilante que sufrir las consecuencias de unas malas condiciones de trabajo que, a veces, incluso no cumple con la normativa.


Entonces puede que así se nivelen los conceptos de oferta y demanda. Y a partir de que esa oferta y demanda se igualen, se podría empezar a hablar de calidad, empezando por realizar una selección adecuada del personal.

Si se comete el error de contratar a cualquiera y de cualquier forma nos encontraremos a un sector masificado, igualmente desmotivado, sin formación y, probablemente, con los mismos problemas o mayores en el futuro porque la rotación del personal seguirá existiendo y las quejas probablemente aumenten, y la calidad, por supuesto, no habrá mejorado.

Por lo que mejorando el aspecto económico, por un lado, y las condiciones de servicio, por otro, estudiando qué mejoras específicas se pueden introducir en un servicio determinado, para que éstos se presten en unas condiciones laborales aceptables, sin menoscabo, por supuesto, de la seguridad del mismo en ningún momento, probablemente no faltarían candidatos para ocupar las plazas de vigilante de seguridad que se necesitan.

Ahora bien, si no nos importa en qué condiciones se realiza el servicio, ni tampoco el grado de satisfacción que puedan tener el personal que lo presta, cualquier solución que se busque puede ser bueno. Pero si lo que se quiere es calidad, se deben poner los medios para conseguirla, pero si lo que se quiere es camuflar la realidad y aparentar lo que no es, entonces cualquier excusa es buena.

Es verdad que una apertura general en el sector paliaría el problema, pero es el camino más fácil y quizás también el más corto, pero dudo que sea el mejor.

El Ministerio del Interior debe sopesar todas las cuestiones y velar por el impacto que pueda producir rebajar los requisitos actuales para el acceso a la seguridad privada. No tienen que influir los intereses comerciales porque la seguridad, como tal concepto, es pública y no tiene precio, y el objetivo que debe imponerse por encima de todo es el de una seguridad de calidad.

jueves, 5 de julio de 2007

Armados las 24 horas

La Inspección de trabajo emite resolución donde dicta que los escoltas deben de ir armados las 24 horas, en defensa de su integridad física y basado en la Ley de prevención de Riesgos Laborales:

Si yo fuera escolta, enmarcaría esta Acta, y al Inspector de Trabajo que la ha emitido dándose ese trabajo argumentar lo haría Doctor Honoris Causa del gremio de los Escoltas y por extensión de todos los Vigilantes de Seguridad.

En el transcurso del tiempo y las miles de denuncias del sector de la seguridad privada que se han puesto en la Inspección de trabajo, sobre todos los temas, habidos y por haber, nunca, un Inspector se ha atrevido a hacer una resolución como esta, al menos que yo tenga conocimiento, y conozco unas cuantas, por lo tanto mis felicitaciones y mi agradecimiento al Inspector, pues esta resolución al igual que la Sentencia de la Horas Extras por el supremo, va a marcar un antes y un después en nuestro sector, a no ser que seamos tan inútiles que no sepamos aprovecharla y la dejemos pasar, como está ocurriendo con la sentencia de las horas.

Aunque el mérito de esta resolución no se lo va a quitar ya, nadie.

Yo no se mucho de las funciones de los escoltas, sin embargo estaba convencido, simplemente por sentido común, de que estos compañeros no estaban obligados a depositar el arma en el armero de la empresa una vez finalizado el servicio, por las mismas razones que expone el inspector.

Aparte de que siempre he sido un firme defensor de que todo vigilante de seguridad en el ejercicio de sus funciones debería de estar armado, ya que el articulo nº 1 de la Ley de Seguridad privada deja bien claro cuales son nuestras funciones, las cuales serían imposible de llevar a cabo al completo si no se porta el arma correspondiente.

Por otro lado, no existiría intrusismo, al menos como lo conocemos ahora, si los vigilantes de seguridad portaran su arma reglamentaria y ejercieran su labor con la máxima responsabilidad y la cualificación adecuada, tal como explica el inspector en su resolución.

Por lo tanto, y es una sugerencia que se me ocurre en estos momentos, como de todos es sabido que la patronal en la modificación que propone de la Ley y su Reglamento de Seguridad Privada, es para dar entrada a los Intrusos en el sector, y adjudicarles las funciones de Auxiliar del Vigilante de Seguridad, el cual no tendría que superar prueba alguna, no física ni Psíquica, en el supuesto caso de que lo consigan, exigir para los vigilantes de Seguridad, que sus funciones se realicen en todo momento con el arma reglamentaria.

Esta sería una forma clara de profesionalizar el sector y de marcar de claramente también la diferencia entre un profesional y un auxiliar, lo mismo que ocurre ahora que donde hay dos vigilantes de servicio, uno con arma y el otro sin ella, siempre cabrá la duda de si el que está sin arma es un auxiliar, cosa que no ocurrirá nunca con el que la porte, y no hablemos ya de la seguridad hacia los demás, que puede ofrecer uno y otro.

Y como siempre he dicho, ¿Qué tiene un Policía de cualquier ramo o un Guardia Civil, que no tenga yo?. Locos y majares los hay en todos sitios y nadie está exento de que en un momento a alguien se le crucen los cables y se cargue a alguien, luego entonces, ¿por que se desconfía solo a los vigilantes?

Saludos.

M. Álvarez.

miércoles, 4 de julio de 2007

Rumanos2

Y otro dato que quería incluir en el anterior post y que olvidé es el hecho cierto, de que después de la transición, y bien entrada la democracia en España, a los españoles que viajaban a Gran Bretaña, se les hacía pasas en las aduanas de los aeropuerto, por pasarelas distintas a las del resto de los europeos, ya que para ellos éramos poco menos que delincuentes y chorizos.

Esto era así inclusive para los primeros diputados que salieron de la primeras elecciones libres que tuvimos después de la muerte de Franco.

Todos sabemos que los españoles, durante la dictadura anterior éramos de los países donde mas emigrantes había, y que no se diga que todos eran de forma legal e iban con contrato previo, pues yo mismo tengo conocidos que fueron clandestinos, tanto en Suiza como en Alemania.

No deberíamos tener tanto pánico a los inmigrantes, pues fueron los inmigran, por poner solo un ejemplo, los que después de la segunda guerra mundial, reconstruyeron Alemania, hasta ponerla el en uno de los primeros lugares del mundo.

Saludos.

M. Álvarez.

Rumanos

Solo una pequeña puntualización al respecto, que considero importante:

Y es que, habría que tener en cuanta que existen dos clases de rumanos, los "rumanos" y los "rumanos gitanos".

He podido comprobar como algún "rumano" que he conocido, reniega del hecho, de que lo puedan confundir con los "rumanos gitanos".

y esta percepción también la tienen algunos amigos con los que he comentado el tema.

Aquí en Córdoba, no está la cosa tan grave, sin embargo si tienen montados varios campamentos en distintos sitios de la ciudad de donde se les ha echado en varias ocasiones pero acto seguido lo vuelven a montar en otro lugar, eso si, tienen controlados todas las puerta de supermercados y aparcamientos públicos con algún que otro semáforo, pero son todos, “rumanos gitanos” que mantienen su política de mendicidad y búsqueda en los estercoleros y recogida de hierros por tradición.

Los “rumanos” te los encuentras realizando trabajos normales, camareros, albañiles y cualquier otro oficio para los que están perfectamente cualificados, pues dicen que son gente muy inteligente.

Y como dato anecdótico, añadir, que, los “rumanos que se quieran colocar en la seguridad privada, serán del tipo y nivel de los españoles, pues los normales prefieren trabajos mas cualificados y mejor remunerados.

Saludos.

M. Álvarez.

martes, 3 de julio de 2007

Sindicalista o Abogado

Estimados compañero:

La honestidad no es patrimonio de nadie de forma que se puede ser muy vil o muy honrado sin que nada tenga que ver los estudios que se tengan realizados, pero eso si, la capacidad intelectual se le presupone superior a las personas que a iguales oportunidades unos sobresalen de los otros, por razones obvias.

Por lo tanto y sobre el tema en cuestión de que si es preferible en un puesto sindical de relevancia a una persona con la carrera de abogado a otra que no tenga estudios pero es un buen sindicalista, pues difícil me lo ponéis pues son dos cosas totalmente distintas.

El buen sindicalista es una persona que se sabe los problemas de su empresa y tiene la capacidad y la valentía de enfrentarse a la empresa, jugándose su puesto de trabajo continuamente, por él y por extensión, por los demás.

El abogado es una persona que se sabe las Leyes y cuando adquiere cierta experiencia puede llegar a ser bueno (no siempre es así) y necesario a la hora de ir a juicio, pero no le pidas que sea valiente como el sindicalista pues el no está para eso.

O sea, la carrera de derecho se estudia pero para ser un buen sindicalista hay que nacer así.

Y hablo de los buenos sindicalistas, no de los aprovechados que en su mayoría tenemos ahora y que muy bien se les podría aplicar el refrán que dice así:

“Ni pidas a quien pidió, ni sirvas a quien sirvió”

En resumen, el abogado para una cosa y el sindicalista para otra y en absoluto tiene que ser, ninguno de los dos mas honrado que el otro en razón a lo que haya estudiado, ya que los valores como honestidad, honradez, lealtad, en definitiva, ser una buena persona, no se compran en el kiosco de la esquina, se llevan dentro desde que se nace.

Saludos.

M. Álvarez.

Sindicalista o

domingo, 1 de julio de 2007

Maricas

Se saltan todas las leyes vigentes de Seguridad Privada, Ley y Reglamento.

Incumplen el convenio colectivo en casi todo el articulado.

Estafan a los trabajadores pagando por debajo de lo establecido en el E.T.

No cumplen la sentencia del Supremo.

Se inventan que los trabajadores les deben dinero a las empresas (habrá desfachatez mas grande).

Propugnan un Conflicto Colectivo para romper el Convenio y negociar otro a su imagen y semejanza, (y por supuesto con los mismo negociadores del anterior que son los comprados, por que a los nuevo los tendrían que comprar también y eso les supondría doble gasto).

Mantienen reuniones con los dirigentes sindicales donde se cachondean de ellos y les dicen: “Bueno, no vemos dentro de un mes y ha ver si tenéis guebos, de montarnos un pollo, --so, maricas--, con todos mis respetos por los maricas”.

Y ya está, ahora nos vamos todos de vacaciones y a la vuelta, ya veremos.

AH, y los trabajadores que aprovechen la oportunidad de las vacaciones que ahora hay un montonazo de horas extras, y a trabajar que son dos días, bueno, quería decir: a vivir que son dos días, aunque creo que en esta profesión no se dice a vivir, si no, a trabajar, queda mucho mejor.

Y a los sindicatos, ¿Qué sindicatos?.

Saludos.

Ram.