Toda esta situación de “Parálisis Cerebral” que al parecer están sufriendo casi todos los líderes sindicales con responsabilidad en la mesa de negociación, viene derivada por el abandono paternal, que han sufrido en esta negociación por parte de la patronal, que debido a la sentencia de las horas extras y su consecuencias económicas, ha decidido romper la baraja y partir de cero.
Nunca se llegaron a imaginar, al creer que lo tenían todo controlado que, un sindicato profesional, para ellos insignificante, les metería ese gol, el de la sentencia de las horas.
La mayoría de nosotros, sabemos que el motivo de paralizar la negociación del convenio colectivo, no es otro que dilatarlo hasta que se pronuncie el supremo y se sepa con claridad lo qué pluses entran y cuáles no entran en el cálculo de las dichosas horas extras.
¿Por qué es tan importante este conocimiento para la patronal?, por que de ello dependen muchos millones de euros, que pueden ganar o pueden perder, según dicte el supremo.
El problema es que esto mismo lo saben los sindicatos que participan en la mesa de negociación y a pesar de eso, le siguen el juego, como suelo decir últimamente, mareando la perdiz y dando palos de ciego sin que de momento acierten ninguno.
¿Como se podría romper este círculo vicioso, sin que hubiera que organizar, ni concentraciones ni huelgas ni leches?. Bajo mi punto de vista, muy sencillo:
Firmando, los miembros de la mesa de negociación, un documento notarial, de estricto cumplimiento, donde se comprometen a regular las horas desde este preciso momento, cuyo precio será el que está estipulado en la mayoría de los convenios de medio mundo, o sea, un 30% superior al precio de la hora ordinaria, para la primera y un 40% para la segunda y sucesivas, que excedan de la jornada laboral ordinaria, y nunca para trabajar en los días de descanso, que eso estaría totalmente prohibido.
Si los sindicatos de la mesa fueran capaces de adquirir este compromiso o cualquier otro de similares condiciones, estoy seguro que la patronal estaría negociando el convenio al día siguiente, ya que habrían perdido el sentido o fundamento de la espera.
Saludos.
M. Álvarez.
martes, 7 de abril de 2009
miércoles, 1 de abril de 2009
Según lo veo yo.
Según lo veo yo.
Veo a una patronal que basa su mayor beneficio en las horas extras y que por lo tanto el convenio le trae al pairo, así que dilatará su negociación hasta que el Supremo se pronuncie y en entonces y solo entonces se llegara a un acuerdo, por supuesto al acuerdo que ellos decidan como han hecho siempre.
Veo a los sindicatos que nos representan en la mesa de negociación, despechados por la patronal, sin apenas credibilidad, sin ideas y sin respaldo de los trabajadores, y dando palos de ciego, sin el valor necesario para convocar una Huelga General Indefinida.
Veo a unos sindicatos profesionales, que están yendo a la saga de los de clase, de forma inexplicable, (¿como se puede ahora apoyar a quien ha traicionado el sector año tras año?) y que si se decidieran y tomaran la iniciativa, y convocaran ellos la Huelga General que todo el mundo está esperando, sería su pistoletazo de salida para salir del anonimato y el del rincón donde los tienen recluidos los de clase.
Veo a un colectivo de trabajadores, insolidario, que sigue realizando horas extras de forma ilegal, a pesar de que no existe precio para ellas, ya que está pendiente de lo que diga el Supremo, y aceptando el que le imponen las empresas, y lo peor aun, que se creen que esto es así por que si, o porque lo diga la empresa, que los tiene a la mayoría engañados.
Y veo a un colectivo, muy reducido, comparado con el grueso del sector, que si sabe lo que quiere y lo que no, pero que está atado de pies y manos por una Ley Sindical que no le permite actuar de forma independiente.
En conclusión, la única salida que yo veo a esta situación es la de la convocatoria de una Huelga General Indefinida, y cuya desconvocatoria solo se llevaría a cavo cuando la patronal aceptara las condiciones de los trabajadores, plasmados en un plataforma reivindicativa consensuada por todos los convocantes, pero no como ahora se pide para que se sienten a la mesa a seguir negociando, eso sería un fraude y una tomadura de pelo.
Saludos.
M. Álvarez.
P.D.
A los que no estamos afiliados por no estar de acuerdo con los sindicatos existentes, pero si estamos de acuerdo en luchar para defender nuestros derechos, darle mi mas sentido pésame, estamos jodidos.
Veo a una patronal que basa su mayor beneficio en las horas extras y que por lo tanto el convenio le trae al pairo, así que dilatará su negociación hasta que el Supremo se pronuncie y en entonces y solo entonces se llegara a un acuerdo, por supuesto al acuerdo que ellos decidan como han hecho siempre.
Veo a los sindicatos que nos representan en la mesa de negociación, despechados por la patronal, sin apenas credibilidad, sin ideas y sin respaldo de los trabajadores, y dando palos de ciego, sin el valor necesario para convocar una Huelga General Indefinida.
Veo a unos sindicatos profesionales, que están yendo a la saga de los de clase, de forma inexplicable, (¿como se puede ahora apoyar a quien ha traicionado el sector año tras año?) y que si se decidieran y tomaran la iniciativa, y convocaran ellos la Huelga General que todo el mundo está esperando, sería su pistoletazo de salida para salir del anonimato y el del rincón donde los tienen recluidos los de clase.
Veo a un colectivo de trabajadores, insolidario, que sigue realizando horas extras de forma ilegal, a pesar de que no existe precio para ellas, ya que está pendiente de lo que diga el Supremo, y aceptando el que le imponen las empresas, y lo peor aun, que se creen que esto es así por que si, o porque lo diga la empresa, que los tiene a la mayoría engañados.
Y veo a un colectivo, muy reducido, comparado con el grueso del sector, que si sabe lo que quiere y lo que no, pero que está atado de pies y manos por una Ley Sindical que no le permite actuar de forma independiente.
En conclusión, la única salida que yo veo a esta situación es la de la convocatoria de una Huelga General Indefinida, y cuya desconvocatoria solo se llevaría a cavo cuando la patronal aceptara las condiciones de los trabajadores, plasmados en un plataforma reivindicativa consensuada por todos los convocantes, pero no como ahora se pide para que se sienten a la mesa a seguir negociando, eso sería un fraude y una tomadura de pelo.
Saludos.
M. Álvarez.
P.D.
A los que no estamos afiliados por no estar de acuerdo con los sindicatos existentes, pero si estamos de acuerdo en luchar para defender nuestros derechos, darle mi mas sentido pésame, estamos jodidos.
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